Primera Exploración: ALBIREO

Lo mejor para empezar a observar nuestro cielo es abrir el apetito con una “suculenta” propuesta: Albireo. Además nos viene de perla ya que se encuentra en el Triángulo de Verano del que comentamos en la página de inicio. Localizarla es muy fácil. Para ello, localicemos Vega y Altair, trazamos una línea imaginaria entre ellas y a mitad de camino veremos un puntito muy tenue, algo desplazado hacia el interior del triángulo. Esa es Albireo. En la siguiente imagen se puede apreciar la posición de esta estrella en el Triangulo. Está hecha sin aumentos de modo que es tal cual la veríamos a simple vista.

Recordar que la foto está tomada en julio, así que en otoño el Triángulo se encuentra al revés, con Vega debajo, Altair a la izquierda y Deneb a la derecha.

¿Qué decir de Albireo, ese puntito blanco en la lejanía? Se trata de una estrella situada a 385 AL de nosotros. Su tamaño es unas 50 veces nuestro Sol y brilla con una intensidad de unas 950 veces la de este. Aun así no se trata de una estrella considerablemente grande, mas bien al contrario. Tengamos siempre en cuenta que el Sol es una de las consideradas estrellas enanas. Pero tranquilidad. Ya yegaremos a la observación de estrellas realmente grandes. Tenemos unas cuantas a la vista durante el año.


Bien, volviendo a Albireo, si disponeis de unos prismáticos os recomiendo mirar Albireo con ellos. Os llevareis una sorpresa. Una vez la encontreis, no hace falta que tengais un gran telescopio ni unos potentes prismáticos. Basta con unos sencillos para ver esto

Sí, esto es Albireo. En realidad se trata de una llamada Estrella Múltiple. Significa que observada a simple vista desde la Tierra parece una estrella simple, pero en realidad está formada por dos o más estrellas que orbitan entre ellas. El caso de Albireo es un sistema formado por tres estrellas (Las dos que se ven más una tercera que queda fuera del alcance del ojo humano). Bien, los datos que hemos comentado antes sobre Albireo, en realidad trataban sobre la estrella primaria, es decir, la amarilla, que es la más grande ¿Qué sabemos de la pequeña? Como se aprecia, es una estrella azul que desprende una luz equivalente a 190 soles y de rápida rotación. En unas 14h da una vuelta entera sobre sí misma. Por el contrario, el tiempo que tarda en dar una órbita completa alrededor de la principal es de más de 75000 años. Cosa por la cual durante un tiempo se dudó de si realmente formaban un sistema de estrellas, es decir, si de verdad orbitaban entre ellas.


Bueno, hasta aquí la teoría, vamos al trabajo de campo. Como hemos comentado, si tenemos unos prismáticos y/o una cámara de fotos, saquémoslos a la calle. Da igual si se vive en medio de la ciudad, a menos que las condiciones ambientales y lumínicas sean realmente desastrosas, la podremos ver.

Para quien tenga prismáticos le recomiendo que se apoye en algo. recordemos que miramos a muchísima distancia, de modo que el más minimo movimiento del pulso nos puede hacer perder la estrella o hacer que no la veamos con claridad. En este caso va bien que los prismáticos empleados no sean muy potentes, ya que a más aumentos más separadas se ven y por tanto, menos se aprecia la diferencia de colorido.

Para quien disponga de una cámara de fotos, vamos a ver cómo llevarse un recuedo a casa. Lo primero es configurar la cámara en modo de "exposición prolongada" o como se llame (según el tipo de cámara tiene un nombre u otro) si no dispone de esta modalidad, ponerla en modo "noche". Pongamos también el temporizador. Hay que tener en cuenta que al pulsar el disparador la cámara se moverá y por lo tanto la imágen también.
Luego, apoyemos la camara sobre algo. No la tengamos cojida al hacer la foto porque de esa manera no saldrá bien. Lo ideal es un trípode. Si no se tiene, se puede hacer uno casero: Cojemos una mesa, silla, cualquier cosa que sirva de base. Ponemos encima un libro abierto con las pájinas hacia arriba (cuanto más grueso sea mejor) y colocamos la cámara apoyada en el centro del libro.
Enfocamos a la estrella como podamos, con todos los aumentos ópticos de los que disponga nuestra cámara (quitemos los aumentos digitales, eso resta definición a la imagen) y disparamos.
Esperamos...
Y a los pocos segundo tendremos la foto. es posible que a primera vista no se aprecie nada, pero al aumentar la imagen empezaremos a ver algo.
La foto saldrá movida, igual que las que veis en el blog. Es normal e inevitable. La razón es muy sencilla: durante el tiempo que la cámara ha estado haciendo la foto la Tierra ha seguido su curso por el espacio, se ha desplazado, por lo tanto las estrellas también. Pero no buscamos sacar fotos de grandes detalles, sino una imágen que nos muestre algo más de lo que ven nuestros ojos. Si al principio no vemos que haya salido gran cosa, no pasa nada. Cuando la ampliemos en el ordenador empezaremos a ver detalles, con poca definición, cierto, pero seguro que más de lo que hemos visto a simple vista. Con eso es suficiente y nos llevamos un pequeño recuerdo de esa estrella que hemos visto a casa.


Hasta aquí la observación de Albireo. Si os gustado, os invitamos a pasar a la

Exploración Guiada 2: JÚPITER